Las Palmas de Gran Canaria posee una amplia oferta hotelera para alojamiento. Recomendamos los siguientes:
C/Muelle Las Palmas, 2– Hotel céntrico enfrente del Parque San Telmo a 1,2 km del lugar del congreso (15 minutos caminando, 6 minutos en coche).
Avenida Alcalde J. Ramírez Bethencourt, 8– Hotel situado frente al mar y a 1,1 km del lugar del congreso (15 minutos caminando, 5 minutos en coche).
Leon y Castillo 244 – Hotel cerca del Muelle Deportivo y la playa de Las Alcaravaneras a 1,2 km del lugar del congreso (16 minutos caminando, 8 minutos en coche).
C/Malteses, 20 esquina C/Doctor Rafael González, 3 – Hotel Emblemático junto al Gabinete Literario a 1,6 km del lugar del congreso (22 minutos caminando, 13 minutos en coche).
Plaza Sta. Ana, 5– Hotel Emblemático a 2 km del lugar del congreso (28 min caminando, 11 minutos en coche).
Plaza Dr. Chil, 13 – Hotel Emblemático a 2, km del lugar del lugar del congreso ( 29 min caminando, 11 min en coccoche).
C/Portugal, 2– Hotel cerca de la Playa de Las Canteras a 3,3 km del lugar del congreso (44 minutos caminando, 15 minutos en coche).
C/Sargente Llagas, 24– Hotel cerca de la Playa de Las Canteras y a 3,6 km del lugar del congreso (48 minutos caminando y a 14 minutos en coche).
C/Simón Bolívar, 24– Hotel cerca del Parque de Santa Catalina y a 3,5 km del lugar del congreso (47 minutos caminando y a 11 minutos en coche).
Cultura y mar
El corazón histórico y colonial de la ciudad, con calles empedradas, balcones de
madera tallada y plazas sombreadas que evocan el ambiente del siglo XV. En él se
encuentra la Catedral de Santa Ana, la Casa de Colón y el Museo Canario. Un lugar
perfecto para pasear sin prisa y empaparse de historia.
Un emblemático edificio contemporáneo frente al Atlántico, con un diseño
arquitectónico inspirado en los paisajes volcánicos de la isla. Un lugar icónico para los
amantes de la música y la fotografía.
Considerada una de las mejores playas urbanas del mundo, con arena dorada, aguas
tranquilas protegidas por una barrera natural de lava, La Barra y un largo paseo
marítimo repleto de restaurantes y heladerías. Al atardecer, la luz dorada sobre el
mar crea un ambiente mágico.
El jardín botánico más grande de España, un oasis verde con cascadas, cactus
gigantes, palmeras endémicas y senderos sombreados que muestran la biodiversidad
de las islas.
Naturaleza y tradición
Un imponente monolito volcánico de 80 metros que se alza sobre el centro de la isla como un guardián de piedra. Su sendero, de dificultad moderada, atraviesa pinares aromáticos y paisajes volcánicos. Desde la cima, el horizonte ofrece vistas inolvidables del océano y, en días despejados, del Teide en Tenerife.
Un pueblo de montaña encantador y pintoresco, de casitas blancas colgadas de las laderas, rodeado de almendros que en febrero tiñen el paisaje de flores rosadas. Sus calles tranquilas invitan a disfrutar de un café con dulces tradicionales como el bienmesabe.
El pueblo más alto de la isla, con un ambiente sereno y auténtico. Famoso por sus casas-cueva excavadas en la roca volcánica, que conservan el frescor en verano. Sus miradores ofrecen panorámicas espectaculares de los barrancos y montañas.
Playas y dunas
Un paisaje desértico sorprendente, con inmensas colinas de arena dorada que se ondulan con el viento y contrastan con el azul del océano. Es un lugar perfecto para caminar al amanecer o al atardecer, cuando la luz crea sombras doradas y mágicas.
Un esbelto faro de piedra del siglo XIX, de 56 metros de altura, que ha guiado a los navegantes durante más de un siglo. Se alza imponente junto al mar y el moderno paseo marítimo.
Una larga franja de arena fina y dorada, bordeada por aguas cristalinas y tranquilas, ideal para nadar o relajarse al sol con vistas al desierto.
Una de las playas más animadas de la isla, con ambiente cosmopolita, bares, restaurantes y deportes acuáticos.
Conocido como la Pequeña Venecia de Gran Canaria, Mogán es un encantador y luminoso pueblo costero que enamora por sus pintorescos canales bordeados de buganvillas multicolores, sus casas blancas de estilo tradicional con balcones rebosantes de flores y su puerto deportivo vibrante y acogedor.
Pueblos con belleza natural
Un pueblo de gran valor histórico y religioso, conocido por sus balcones de madera tallada, casas señoriales y calles empedradas llenas de flores. Aquí se encuentra la Basílica de Nuestra Señora del Pino, patrona de la isla. No dejes de probar el famoso chorizo de Teror.
Una ciudad norteña dominada por la majestuosa Iglesia de San Juan Bautista, de estilo neogótico y construida con piedra volcánica gris. Es célebre por la Destilería Arehucas, donde se produce el emblemático ron canario; se pueden visitar sus bodegas y realizar catas.
Antigua capital prehispánica de Gran Canaria, es una histórica y cautivadora localidad que conserva la esencia cultural y ancestral de la isla.
Su mayor tesoro es la Cueva Pintada, un fascinante yacimiento arqueológico decorado con enigmas geométricos en tonos rojizos y ocres, que ofrece una mirada única al universo simbólico de los antiguos canarios.
Su centro histórico, vibrante y acogedor, con calles adoquinadas, casas señoriales coloridas y la majestuosa iglesia de Santiago de los Caballeros.
Agaete es un sereno y pintoresco rincón costero en el noroeste de la isla, rodeado de espectaculares acantilados volcánicos que descienden abruptamente hacia el océano Atlántico. Sus famosas Piscinas Naturales de Las Salinas, talladas por la propia naturaleza, ofrecen un refugio tranquilo de aguas transparentes.
El Puerto de las Nieves, con sus blancas casas encaladas y puertas de un azul vibrante, es un lugar cálido y acogedor, célebre por su atmósfera marinera.